SINOPSIS: En esta línea narrativa es que la impactante y sorprendente historia de un suicida cotidiano arrastrará al lector, desde la angustia y la compasión, a la sorpresa de un final mordaz e inesperado en que el humor estalla aún en los detalles no explícitos de esta breve historia de una intimidad compleja.
OPINIÓN PERSONAL: Lo que hay que destacar de esta antología, en primer lugar, es el estilo del autor a la hora de abordar cada uno de los relatos: usar el humor ante hechos, anécdotas y situaciones que han marcado la vida de los habitantes de Argentina. Mas adelante, emerge el amor en diferentes variantes y matices.
Siendo él militante político, además de periodista, me sorprendió que utilizara este recurso para hablar de la libertad, la justicia, la critica social que se expresa en la cotidianidad o el poder envuelto en un juego de ironía sutil. Sin olvidar que este es un ámbito jodido de plasmar inteligéntemente y caer bien parado, Avellaneda lo logra sin problemas como si el verdadero propósito fuese reírnos de nosotros mismos.
Ahora, si tuviera que elegir mis favoritos serían El tren de las once, La manipulación del tiempo (todo lo que tenga que ver con algo temporal, bienvenido sea), El milagro de Cristela y El duende enamorado (una de las pocos que comparten un mismo mundo), Sensación sensacional (una crítica a la autocrítica del día a día), Discriminación (la paradoja de la denuncia y el sentirnos menospreciado por la gente menos pensada) y El doctor Cocolisso (donde no podemos confiar ni de quien nos está relatando su historia).
DATO DE COLOR: el título del libro alude a uno de los relatos.
Y por último, pero no por eso menos importante, agradecer a la editorial por el ejemplar.
CALIFICACIÓN: ✭✭✭✰✰
Portada original FRASES DESTACADAS "Nos costo demasiado esta libertad nuestra. Demasiados esfuerzos, demasiada cárcel; demasiados muertos. Demasiadas palabras. (...) Por eso hay que cuidarla, y rendirle homenaje cada día. (...) No importa tanto si hoy, aun equivocados, hay quienes reivindican, sin pudor, la censura. Bendita seas, libertad. Nosotros, que estamos de tu lado, te expresamos a diario." "Todos los mortales, en mayor o menor medida, acunamos en nuestro corazón la ilusión de que otro nos quiera. Esta aspiración es más que legítima, sobre todo cuando se siente capaz de prodigar amor. (...) porque el amor de la amistad exige un tipo de confianza total en el otro, una manera de ser y de pensar humanamente, activa y desinteresada. Eso nos implica librar un combate constante por la libertad, liberados de los intereses." |
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