OPINIÓN PERSONAL: Mi incentivo por leerlo venía luego de la avasallante y perturbadora experiencia que me dejó Battle Royale (el libro, no la película) el año pasado. La sinopsis me recordó a eso: UN SOLO GANADOR, EL RESTO MORIRÁN. Sin embargo, en vez de ser una isla, resulta ser una carretera que se extiende a lo ancho y largo de Estados Unidos cuyos participantes son anotados por sorteo, en otras palabras, por azar.
Fraccionada en tres partes, la idea resulta buena al principio decayendo en el medio para repuntar hacia el final ante un panorama que nos dejará reflexionando y filosofando temas como, en primer lugar, la propia existencia de nuestra vida, la (in)tolerancia, la locura, la soledad, acompañado con su típica cuota de creencia cristiana por el temor a la muerte.
A lo largo de 18 capítulos, conoceremos a algunos de los concursantes como Art Baker, Olson, McVries y Garraty, todos distintos tanto físico como su forma de ser. Una carrera que los pondrá a prueba constantemente ante cualquier adversidad que se les presente.
Rescato que, a diferencia de otras novelas de King, su narración es lineal, siendo un punto a favor para muchos ya que el recurso del flashback es utilizado muy poco y no resulta esencial en la trama.
Una obra que se aleja del clásico terror que nos tiene acostumbrado el autor pero sin perder su esencia fantástica. Y en cuanto a la calificación es porque lo leí en digital y la manera de clausurar las historias suelen producirme generalmente sentimientos encontrados, incomodarme a tal punto de dejarme con un gusto ácido.
CALIFICACIÓN: ✭✭✭✰✰
FRASES DESTACADAS
"-Yo no pienso apresurarme -dijo uno de ellos-. ¿Para qué? Y si me señalan un aviso, ¿qué más da? Me adapto, y ya está. Aquí la palabra clave es adaptarse."
"(...)prefiero vivir día a día. Si la gente se preocupara sólo del día presente, viviría mucho más feliz."
"Camina o muere, ésa es la moraleja de este cuento. Así de sencillo. No se trata de la supervivencia del más preparado. Ahí fue donde me equivoqué al meterme en esto. Si lo fuera, tendría bastantes posibilidades. (...) No se trata del hombre o Dios. Es algo… del cerebro."
"El trabajo del día era pensar. La mente y el aislamiento, porque en el fondo no importaba si uno pasaba las horas con otro o no: en el fondo uno iba solo. (...)Los pensamientos seguían surgiendo y no había manera de rechazarlos."
"Todos los juegos son limpios si todo el mundo es engañado a la vez."